Uno de los peligros más comunes cuando un menor navega por Internet es
que se acceda a material que no es adecuado para la edad de los niños y jóvenes,
ya sea de carácter sexual, violento o relacionado con temas como las drogas,
las armas, los juegos de azar etc. Los niños pueden toparse con este tipo de
estos contenidos mientras buscan información, juegan o ven un video, al
aparecer en muchas ocasiones en forma de banners, pop-ups o enlaces
publicitarios que les derivan hacia otras páginas web.